LOST IN HEAVEN - FRANCESCA BIANCHI

LOST IN HEAVEN - FRANCESCA BIANCHI

Accords : Dulce, picante, animal, floral 
Humeur : reconfortante, sensual, desobediente

La doble naturaleza de todo ser humano: la aspiración a la perfección, a la inocencia, a la ausencia de error, a un lugar no contaminado por el pecado por un lado, y la inevitable falibilidad y la imposibilidad de enmendar los errores por otro. La combinación de flores blancas y facetas animales representa esta dicotomía, como una invitación a aceptar tanto el idealismo como la imperfección como una característica humana muy específica.

Notes : pomelo, mandarina verde, absoluto de flor de naranjo, jazmín, ylang extra, mimosa, magnolia, comino, canela, cilantro, ámbar gris, almizcle, castóreo, cera de abeja, manteca de iris, absoluto de cisto, opoponax, heliotropo, vetiver, madera de sándalo, pachulí, haba tonka.

Se trata de un extracto de perfume, que debe usarse con moderación ya que la concentración es del 25%. Tiene una gran longevidad (12h de media).

Perdido en el Cielo retrata una secuencia de sueño de un adulto que se pierde en el paraíso. 

Representa la complejidad de los sentimientos que traducen tanto la aspiración a un lugar de inocencia no contaminada y de amor incondicional como la carga inevitable y controvertida de la vida, hecha de sentimientos de pecado y culpa - reales o, peor aún, imaginarios.

Esta dicotomía, que se encuentra en el fondo del alma de cada uno, está representada por una selección de las notas más angélicas: los magníficos absolutos de flor de naranjo y jazmín, así como la dulce heliotropo, la untuosa madera de sándalo, la dulce haba tonka y muchas otras notas que considero paradisíacas. 

El lado más oscuro se transmite de manera mucho más sutil, no detectable de inmediato, a través del comino y otras especias, y una amplia selección de notas animales, incluida una reconstrucción del Almizcle de Tonkín. 

He tenido la idea de llamar a este perfume « Feeling Good », porque ese es su objetivo: hacerte sentir como en el paraíso, no un paraíso imaginario, sino un lugar real donde finalmente puedes enfrentar tu lado oscuro, la pesada carga que llevas contigo. 

Frágil, sensual, emocional, sin ser técnicamente goloso, me hace pensar en un pastel, rico en especias y con un aroma de flor de azahar: no es alta repostería, sino el olor arquetípico de un pastel hecho por mamá, con solo cosas buenas dentro;